05 · 09 · 2023
Categoría / coloproctólogo
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¿Qué son las colonoscopias y para qué sirven?

Las colonoscopias son pruebas que permiten ver el interior del colon y el recto, que son las partes finales del intestino grueso. El colon y el recto son los órganos donde se almacenan y se expulsan las heces.

Las colonoscopias se realizan con un instrumento llamado colonoscopio, que es un tubo flexible con una cámara y una luz en su extremo. El colonoscopio se introduce por el ano y se avanza por el recto y el colon, mientras se transmite una imagen en una pantalla.

Las colonoscopias tienen varios objetivos, como:

  • Detectar pólipos o tumores que puedan ser malignos o precancerosos.
  • Diagnosticar enfermedades inflamatorias del intestino, como la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn.
  • Evaluar síntomas como sangrado, dolor, diarrea o estreñimiento.
  • Tomar muestras de tejido (biopsias) para su análisis.
  • Realizar tratamientos como la extirpación de pólipos, la dilatación de estenosis o la coagulación de sangrados.

Las colonoscopias son pruebas seguras y eficaces para explorar el colon y el recto. Sin embargo, como toda prueba invasiva, tienen algunos riesgos, como:

  • Infección: Es poco frecuente, pero puede ocurrir si se introducen bacterias en el intestino durante la prueba. Se puede prevenir con antibióticos antes o después de la prueba.
  • Perforación: Es muy rara, pero puede ocurrir si el colonoscopio daña la pared del intestino. Puede causar dolor, fiebre, sangrado o peritonitis (inflamación del abdomen). Se puede tratar con cirugía o antibióticos.
  • Sangrado: Es poco común, pero puede ocurrir si se toman biopsias o se realizan tratamientos durante la prueba. Puede causar anemia, debilidad o mareos. Se puede tratar con medicamentos, transfusiones o cirugía.
  • Reacción a la sedación o la anestesia: Es rara, pero puede ocurrir si el paciente tiene alguna alergia o complicación con los medicamentos que se usan para relajarlo o dormirlo durante la prueba. Puede causar náuseas, vómitos, dificultad para respirar o problemas cardíacos. Se puede tratar con medicamentos o medidas de soporte.

¿Cómo se realiza una colonoscopia?

Para realizar una colonoscopia, se requiere una preparación previa, que consiste en:

  • Seguir una dieta líquida el día anterior a la prueba, para vaciar el intestino de heces y facilitar la visión.
  • Tomar un laxante o un enema la noche anterior o la mañana de la prueba, para limpiar el intestino de residuos.
  • No tomar medicamentos que puedan interferir con la prueba, como anticoagulantes o antiinflamatorios, salvo indicación médica.
  • Informar al médico de cualquier alergia, enfermedad o embarazo.

La colonoscopia se realiza en un hospital o una clínica, bajo sedación o anestesia. El paciente se acuesta sobre una camilla, boca arriba o de lado, y se le coloca un monitor para controlar sus signos vitales. El médico introduce el colonoscopio por el ano y lo va avanzando por el recto y el colon, mientras observa las imágenes en la pantalla. El médico puede inflar aire para distender el intestino y mejorar la visión, lo que puede causar alguna molestia o sensación de presión. El médico también puede tomar biopsias o realizar tratamientos con instrumentos especiales que se introducen por el canal del colonoscopio. La duración de la prueba puede variar entre 15 y 60 minutos, según la dificultad y el objetivo.

Después de la colonoscopia, el paciente permanece en observación hasta que se le pasa el efecto de la sedación o la anestesia. El paciente puede sentir algunos síntomas como gases, cólicos o sangrado leve, que suelen desaparecer en unas horas. El paciente debe seguir las recomendaciones del médico sobre la dieta, los medicamentos y los cuidados posteriores. El médico informará al paciente sobre los resultados de la prueba y le indicará si necesita algún tratamiento o seguimiento adicional.

Preguntas frecuentes sobre las colonoscopias

¿Qué se siente durante una colonoscopia?

Durante una colonoscopia, el paciente puede sentir alguna molestia o sensación de presión en el abdomen, debido al aire que se introduce para distender el intestino. También puede sentir algunos calambres o espasmos en el intestino, debido al movimiento del colonoscopio. Estas sensaciones suelen ser leves y tolerables, y se alivian con la sedación o la anestesia. El paciente puede estar consciente o dormido durante la prueba, según el tipo de sedación o anestesia que se use.

¿Qué se puede comer después de una colonoscopia?

Después de una colonoscopia, el paciente debe seguir una dieta blanda y progresiva, que evite los alimentos que puedan irritar el intestino o causar gases. Algunos ejemplos de alimentos permitidos son: caldos, sopas, purés, arroz, pasta, pollo, pescado, yogur, queso fresco, frutas cocidas o peladas. Algunos ejemplos de alimentos prohibidos son: legumbres, verduras crudas, frutos secos, semillas, cereales integrales, carnes rojas, embutidos, leche entera, quesos curados, frutas con piel o pepitas. El paciente debe beber suficiente agua y otros líquidos para hidratarse y evitar el estreñimiento. El paciente debe reintroducir los alimentos habituales de forma gradual y según su tolerancia.

¿Qué complicaciones pueden surgir después de una colonoscopia?

Las complicaciones después de una colonoscopia son poco frecuentes y suelen ser leves y transitorias. Algunas de ellas son:

  • Gases: Es normal que el paciente tenga gases después de una colonoscopia, debido al aire que se introduce para distender el intestino. Los gases suelen desaparecer en unas horas y se pueden aliviar con masajes o caminatas.
  • Sangrado: Es posible que el paciente tenga un sangrado leve por el ano después de una colonoscopia, especialmente si se han tomado biopsias o se han realizado tratamientos durante la prueba. El sangrado suele ser escaso y se detiene solo. Sin embargo, si el sangrado es abundante o persistente, se debe consultar con el médico.
  • Dolor: Es normal que el paciente tenga un dolor leve en el abdomen después de una colonoscopia, debido a la distensión del intestino o a la manipulación del colonoscopio. El dolor suele ceder con analgésicos o antiespasmódicos. Sin embargo, si el dolor es intenso o persistente, se debe consultar con el médico.
  • Fiebre: Es raro que el paciente tenga fiebre después de una colonoscopia, pero puede ocurrir si hay una infección o una perforación en el intestino. La fiebre suele ir acompañada de otros síntomas como escalofríos, sudoración, náuseas o vómitos. Si el paciente tiene fiebre después de una colonoscopia, se debe consultar con el médico.

¿Cada cuánto tiempo se debe hacer una colonoscopia?

La frecuencia con la que se debe hacer una colonoscopia depende del motivo por el que se realiza la prueba y del resultado de la misma. En general, se recomienda hacer una colonoscopia cada 10 años a partir de los 50 años como método de prevención del cáncer colorrectal. Sin embargo, esta frecuencia puede variar según los factores de riesgo individuales, como los antecedentes familiares o personales de pólipos o cáncer colorrectal, las enfermedades inflamatorias del intestino o los síndromes hereditarios. El médico indicará al paciente la periodicidad

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